En mis clases de Yoga, nos sumergimos en la práctica del Hatha Yoga Dinámico combinado con el Yin Yang Yoga, una fusión que equilibra las energías opuestas de YIN y YANG, pasividad y actividad, respectivamente. Esta combinación busca unir mente, cuerpo y espíritu, y su principal objetivo es promover la integración holística y el bienestar completo.
En la primera parte de la práctica, nos enfocamos en posturas dinámicas y poderosas, generando vitalidad y energía (YANG). Estas posturas vigorizantes nos ayudan a fortalecer y tonificar el cuerpo, mientras nos conectamos con nuestra fuerza interior.
En la segunda parte, nos sumergimos en la práctica de YIN Yoga, donde habitamos las posturas por períodos más prolongados, utilizando elementos de apoyo. Aquí, además de trabajar con la respiración, nos enfocamos en explorar las sensaciones físicas y emocionales que surgen en cada postura. Este enfoque nos ayuda a trabajar en las capas más sutiles del cuerpo, como los tejidos conectivos, las fascias y los meridianos de energía, promoviendo la flexibilidad y liberando bloqueos energéticos.
La práctica de Yoga no se limita únicamente a la colchoneta; se extiende a la vida cotidiana, mejorando nuestra respiración, nuestra postura y nuestra capacidad para gestionar nuestras emociones y sentimientos como pueden ser el estrés, el enojo, la incomodidad, la ansiedad, etc. A través de la conexión cuerpo-mente-espiritu, cultivamos una mayor conciencia de nosotros mismos y del mundo que nos rodea.
Recomiendo esta práctica para aquellos que deseen equilibrar sus energías internas y profundizar en su práctica de Yoga, así como para aquellos que buscan un momento de relajación profunda y renovación.
No necesitas experiencia previa. En cada sesión, te guiaré para que te conectes contigo misma a un nivel más profundo, ayudándote a explorar tu propio potencial y a encontrar la calma en medio del ajetreo diario.
¡Únete a mí en esta aventura de autoexploración y transformación a través del Yoga!